Para la mayor parte de la sociaedad, el comer con otras personas o salir a comer son las principales formas en que socializamos y celebramos eventos especiales, como días festivos o cumpleaños. Es lo primero que viene a nuestras mentes cuando planeamos una cita, un reencuentro con viejos amigos o familiares. Así el comer está comúnmente relacionado con alegría y festejo, sin embargo, para algunas personas el proceso de comer frente a otros puede provocar una gran ansiedad.
En el artículo sobre tipos de ansiedad social, mencioné una categoría más específica que algunas personas experimentan a la hora de comer en público. Es posible que les pase delante de una persona o sólo ante un grupo de personas desconocidas. En este post veremos a qué se debe la deipnofobia y qué pasos podemos tomar para mejorar.
INDICE
¿Por qué me da vergüenza comer en público?
El miedo a comer delante de los demás es una forma de ansiedad. Puede desarrollarse como un síntoma del trastorno de ansiedad social, que ocurre en personas que tienen miedo de ser juzgadas o rechazadas en situaciones sociales.
Existen muchas razones por las que una persona puede sentir vergüenza de comer en público y por lo tanto, evitar este tipo de situaciones. Algunas de las preocupaciones más comunes son:
- Sentir que estás comiendo de mala manera
- Sentir que el ruido al masticar molesta a los otros
- Sentirte torpe utilizando los cubiertos
- Miedo a atragantarse con la comida
- Pensar que todos están juzgando su comida
Un estudio reciente encontró que el miedo a comer en público era un síntoma común tanto de los trastornos alimentarios como de la ansiedad social. Cabe señalar que no todas las personas que tienen un trastorno alimentario tienen un trastorno de ansiedad social y, de manera similar, no todas las personas con ansiedad social tienen un trastorno alimentario.
Síntomas
Cuando ocurre como resultado del trastorno de ansiedad social, el miedo a comer frente a otros puede hacer que las personas se sientan bastante cohibidas y pueden tener síntomas fisiológicos, como malestar estomacal, corazón acelerado y palmas sudorosas, movimientos robóticos (tu cuerpo se tensa), y falta de apetito. La pregunta más sencilla para determinar si alguien posee este tipo de ansiedad es si se sienten cómodos comiendo a solas y sólo experimentan esta ansiedad ante un grupo de personas.
En muchos casos, la deipnofobia se desencadena por eventos traumáticos pasados relacionados con la alimentación. Cuando es muy extrema incluso tienen que dejar su empleo u otras actividades públicas porque no pueden comer con otras personas.
Comportamientos de personas con deipnofobia
A continuación he recolectado algunos comportamientos típicos experimentados por personas que tienen de deipnofobia. Creo que nos puede ayudar a entender más la mentalidad de personas que tienen este tipo de ansiedad:
Para mí, simplemente estaba muy consciente de comer frente a los demás. En mi infancia, vivía con familiares que hacían ruido mientras comían. Tenía miedo de que me percibieran como si fuera como ellos.
Sólo con desconocidos
Cuando era adolescente, de vez en cuando tenía un trastorno alimentario y hábitos de dieta locos. No comería con la familia. Incluso ahora algo de eso se queda conmigo. No tengo un trastorno, pero si hay una gran fiesta o situaciones con personas con las que no soy cercano, tiendo a no querer comer frente a ellos.
Una preferencia
No puedo disfrutar de una comida delante de otras personas. Prefiero comer solo. Voy a restaurantes pero siempre voy solo. Sobre todo bufés. Podría estar allí unas horas y, sinceramente, no quiero a nadie cerca de mí porque interfiere con mi placer de la comida.
Sentirse observado
El problema de comer frente a otras personas es que quita la experiencia. Puede que me resulte difícil disfrutar de una comida cuando sé que alguien más me está mirando. Se siente como si estuvieran juzgando cada bocado y me hace sentir cohibido.
Cómo vencer el miedo a comer delante de alguien
Independientemente de si se trata de una afección de salud mental, un trastorno alimentario o una combinación de ambos, el miedo a comer cerca de otras personas proviene de una ansiedad subyacente. Si lucha con el miedo a comer en público, el tratamiento es el primer paso para liberarse de su ansiedad. Si vive con un trastorno alimentario, un programa de tratamiento puede ayudarlo a sanar su relación con la comida y desarrollar nuevas formas de pensar sobre la alimentación y la imagen corporal, para que se sienta cómodo disfrutando de las comidas con los demás nuevamente.
El primer paso para tratar cualquier fobia es deshacerse de las falsas suposiciones. Así las personas con ansiedad por comer han podido experimentar en su pasado críticas por la forma en la que comían o por lo que escogían.
Las buenas noticias es que esta fobia es relativamente fácil de superar con un tratamiento continuo con medicamentos y terapia cognitiva conductual.
Este tipo de terapia implica identificar pensamientos automáticos negativos y reemplazarlos con patrones de pensamiento más racionales. Además, alguna forma de entrenamiento de exposición suele complementar esta práctica de reestructuración cognitiva. La exposición puede significar escenarios reales de comida y bebida en los que otros participantes del grupo actúan como compañeros de comida.
Consejos prácticos
- Coméntaselo a amigos en los que puedas confiar: Pongo énfasis en la palabra amigo. Es decir, alguien que no te vaya a bajar incluso más tu autoestima o a quitarle importancia como si fuese algo de lo que te puedes deshacer de la noche a la mañana. Te pueden ayudar a vencer tu miedo poco a poco y a ser pacientes. Una vez que sabes que la persona te entiende y quiere que mejores, te será más fácil relajarte.
- Entiende qué lo desencadena : podría ser la persona con la que está cenando, el lugar, la temperatura, el tipo de comida (arriba), la hora del día. O simplemente combinación de estos. Elija y adapta los distintos escenarios que sean más fáciles para ti.
- No establezcas expectativas demasiado altas: cuando luchas contra cualquier tipo de ansiedad en común ver mejoras y de repente sentir que has vuelto a empezar. La ansiedad se apodera de ti de repente y sin previo aviso. Pero quédate con los momentos de victoria y entiende desde el principio que el camino va a estar lleno de obstáculos. Por lo tanto, haz lo mejor que puedas, pero no establezcas expectativas demasiado altas.
- Prueba las porciones reducidas: Cuando me entraba ansiedad en primeras citas y sabía que me iba a ser difícil comer esto me servía mucho. Escogía platos fáciles de masticar y que viniesen en raciones pequeñas. Comía lento en comparación con el resto de comensales, pero ten en cuenta que nadie está atento de cada movimiento que haces. Si hacen un comentario sobre ellos recuerda que no es nada personal y probablemente se sientan mal con ellos mismos al sentir que están comiendo demasiado, y no al contrario.
Déjame saber en los comentarios qué es lo que más difícil te resulta de comer en público? Te leo!! ✌️
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